El hecho de entrenar a un perro implica ayudarle a desarrollar ciertas habilidades innatas potenciando, al mismo tiempo, una óptima comunicación con su entrenador y con su dueño. Más ágil, más sano y más listo… un entrenamiento adecuado siempre es bueno para el perro y positivo en cualquier ámbito. Además, uno de los grandes beneficios del entrenamiento canino y que sin duda más se disfruta es la evolución de la convivencia entre el can y su familia.
Existen distintos tipos y niveles de entrenamiento, desde el básico, en el que el can aprende normas y órdenes básicas, hasta los más especializados, que preparan al animal para cumplir labores específicas (policías, perros guías, de búsqueda y recate…). Es importante dejar claro que cualquier perro puede ser entrenado aunque ese adiestramiento debe adaptarse a las características físicas y psicológicas de cada animal. Y cada tipo de entrenamiento canino tiene diferentes ventajas así que si estás dispuesta a intentar entrenar a tu perro tú misma o quieres llevarle a alguna escuela canina donde reciba un entrenamiento especializado, debes saber que un adiestramiento adecuado, basado en el refuerzo positivo, puede suponer múltiples beneficios tanto para tu mascota como para vuestra convivencia.
5 motivos por los que conviene entrenar a tu perro
No creas que el entrenamiento cambiará el carácter y la particular forma de ser de tu mascota. Un entrenamiento básico es una excelente herramienta para lograr que vuestra relación sea todavía mejor y también es una magnífica ayuda a la hora de prevenir o eliminar comportamientos del perro que son inapropiados. Entre los múltiples beneficios del entrenamiento canino hay 5 buenas razones que debes tener en cuenta y por las que deberías decidirte a comenzar desde ya con tu mejor amigo.
1. Perro sano y equilibrado
El entrenamiento del perro siempre implica una combinación de ejercicios físicos con otros encaminados a favorecer el desarrollo cognitivo y mental. Por ejemplo, que tu perro “haga deporte”, mejorando su coordinación de movimientos y su agilidad en general, es, sin duda algo bueno. Si además su entrenamiento incluye técnicas que potencien sus sentidos: vista, oído y olfato y también su inteligencia… todo son ventajas y tendrás un perro rebosante de energía y “despierto” como pocos.
2. Mejora de la comunicación
La mejora de la comunicación del perro es uno de los grandes beneficios del entrenamiento canino. Tu mascota no tiene que ser un perro especial. Si quieres entender mejor a tu perro, tendrás que enseñarle (o hacer que le enseñen) las órdenes básicas y también los gestos claves de un lenguaje verbal que él comprenderá a la primera. Si entrenas o tu perro con algunos materiales básicos o ya si lo haces con ayuda de un profesional, la comunicación mejorará y lograréis una unión capaz de resistir ante cualquier circunstancia. Tu perro te entiende y tú a él.
3. Reeducación
A veces el entrenamiento es la mejor manera de corregir conductas problemáticas que pueda tener tu perro. Algunos problemas de agresividad en el can o de desobediencia y comportamientos inadecuados pueden superarse con un entrenamiento adecuado. Cosas como evitar los tirones de la correa durante el paseo, mobiliario “destrozado” cuando le dejas solo en casa, ladridos o gruñidos a las visitas… el entrenamiento puede ser la solución a estas situaciones que no quieres.
(Jaromir Chalabala) || Shutterstock
4. Perro “todoterreno”
Lograr que tu perro sea tu mejor compañero y pueda compartir contigo más parcelas de tu vida cotidiana es otra de las ventajas que os proporcionará su entrenamiento. Poder viajar con tu perro, llevarlo tranquilamente en tu coche si os vais de viaje, lograr que camine a tu lado tranquilo en unos grandes almacenes o que permanezca tumbado junto a ti en una terraza de verano… solo es cuestión de proporcionarle el adiestramiento adecuado.
5. Desarrollo de todas sus habilidades
No hace falta que tu perro sea un animal de cualidades extraordinarias. Muchos canes cuando inician su entrenamiento sorprenden a sus dueños haciendo cosas de las que no les consideraban capaces. ¿Por qué poner limitaciones a tu mascota?
Deja que con un buen entrenamiento sea capaz de dar lo mejor de sí mismo y de paso ganar independencia. Seguro que a él le gusta la idea y tal vez te deje con la boca abierta cuando compruebes lo que es capaz de hacer.
