Seguro que te esfuerzas por ofrecerle a tu mejor amigo de cuatro patas todas las atenciones del mundo, es el rey de la casa pero ¿sabes si tu perro es realmente feliz? Comprobarlo es muy fácil, basta con fijarnos en el comportamiento canino y en su lenguaje corporal. Si tu perro cumple con los siguientes síntomas, seguro que es un perro muy feliz:
1- La comida les da la felicidad
Igual que nos pasa a las personas, los perros son inmensamente felices cuando comen. Si ves que tu perro disfruta y arrasa con la comida cada vez que le llenas el cuenco de pienso es el mejor reflejo de que tu perro es feliz. Puede perder el apetito por otras causas, como que no le guste esa comida, se haya cansado o esté enfermo, pero un perro con apetito es feliz.
2- Duerme todo lo que necesita...
¿Sabías que un perro duerme de media 16 horas al día? Los cachorros pueden llegar a dormir hasta 20 horas diarias, un descanso imprescindible para recuperar fuerzas. El problema llega cuando ves que tu perro está apático y pasa más horas de las que debería tirado en su cama o en el suelo. Puede estar enfermo o deprimido, así que asegúrate de que descansa lo suficiente.
3- Pero siempre está listo para jugar
Aunque se pase 16 horas durmiendo, un perro feliz siempre será un perro activo, aunque sea de una raza de perros tranquila. A todos los perros les encanta jugar con sus dueños, parece que nunca se cansan, y es una de las mejores muestras de felicidad que el perro nos pueden dar. Una vez más, si vemos que el perro está apático, que ya no le apetece jugar con nosotros, es que algo le pasa.
4- Siempre con sus dueños
Seguro que consideras a tu perro tu mejor amigo y un miembro más de tu familia, al mismo nivel que a tus padres, hermanos o hijos, y a él le pasa lo mismo. Vosotros sois su familia, y un perro feliz disfruta de la compañía de sus dueños. De ahí que antes de entrar por la puerta de casa esté frente a la puerta meneando la cola para darnos una calurosa bienvenida, o esa afición por sentarse encima nuestro cuando estamos viendo la tele.
5- La cola
De hecho, ese movimiento rítmico de la cola que hace cuando te espera en la puerta y en otros muchos momentos del día es uno de los indicadores más claros de la felicidad perruna. Esa felicidad también se refleja en una posición corporal relajada, con la propia cola y las orejas en una posición natural, lejos de esa cola y esas orejas levantadas o tiesas que vemos cuando el animal está tenso. Durante las 24 horas del día puede pasar de un estado a otro, pero la mayoría del tiempo estará relajado.
6- Siempre quiere cariño
Además de disfrutar de tu compañía, un perro feliz te pedirá caricias y cariños. El mejor síntoma lo vemos cuando el perro se tumba panza arriba para que le rasques la barriga, una de las cosas que más gusto les da. Es sinónimo de confianza y bienestar. También lo harás feliz acariciando su lomo, pero recuerda que generalmente los perros detestan los abrazos.
7- Es curioso
Los perros no son cotillas, son curiosos, demuestran un gran interés por todo lo que les rodea; y una de las principales curiosidades del perro es que los perritos felices no dejarán nunca de rodear, olfatear o inspeccionar cualquier novedad que llegue a casa, desde las bolsas de la compra a cualquier persona a la que hasta ahora no conocían. Un perro que no tiene ningún interés por lo nuevo y lo desconocido tiene serios problemas de ánimo.
8- No es obsesivo ni destructor
Finalmente, no podemos confundir un perro juguetón con un perro destructivo u obsesivo. Una cosa es jugar, y otra arrasar con todo lo que tiene a su alrededor. Si tienes jardín y el perro tiene una gran fijación por comerse el césped o si ves que pasa horas persiguiendo su propia cola, el animal tiene un miedo o una ansiedad que le impiden alcanzar la felicidad.
Ahora ya sabes cuáles son las señales para saber si tu perro es feliz más evidentes. Así, el siguiente paso es analizar su comportamiento y observar si tu perro cumple algunos de estos puntos. ¿Es tu perrito el perrito más feliz del mundo mundial? No te quedes sin saberlo.
