No hay nada mejor que disfrutar de un día lejos de casa con nuestro perro, pero los canes tienen una relación de amor-odio con los coches que a veces nos cuesta entender. ¿Cómo llevaremos al perro en coche? Su tamaño sí que importa, ya que a un perro pequeño lo podemos llevar en el transportín pero si el perro es grande deberíamos utilizar una reja o un separador de cargas para viajar con el animal de forma segura, ya sea para ir al veterinario, a pasar un día en la naturaleza o de vacaciones al pueblo.
La importancia de rejas y separadores
Todavía hay quien pone en duda la importancia de instalar una reja o separador de cargas, pero contar con uno de estos separadores es la mejor decisión que puedes tomar, tanto por tu seguridad como por la del perro. El animal podrá deambular tranquilamente en un compartimento donde no os molestará ni a ti ni al resto de ocupantes del vehículo, reduciendo el estrés que puede sufrir el conductor cuando viaja con un perro. No podrá saltar hacia delante ni ocupar nuestro sitio, y tendrá espacio para moverse.
Otra de las ventajas de instalar una reja o separador la encontramos en caso de accidente. Si el perro viaja suelto, sin ningún tipo de sujeción ni ninguno de estos elementos de seguridad, es fácil que el animal salga despedido en caso de colisión, impactando contra el conductor, contra otro ocupante del vehículo, contra un asiento o incluso saliendo despedido del coche, rompiendo las lunas. Está claro que las probabilidades de que eso ocurra si llevamos una reja o separador se reducen, más si le añadimos un doble arnés de seguridad al perro.
Viajar con el perro suelto está claro que es peligroso, pero además te pueden multar. En este sentido el código de circulación es muy ambiguo, pero viajar con el perro -o cualquier mascota- de forma inapropiada puede suponerte una multa de 50€. El simple hecho de instalar estos mecanismos de seguridad te ahorrará la multa y cualquier disgusto en caso de accidente. Y aunque el transportín es una buena opción, también hay que saber cómo utilizarlo ya que no todo el mundo lo hace bien.
El transportín y las rejas
Lo primero de todo es, ¿dónde coloco el transportín? Hay quien lo pone en el asiento trasero o en el del copiloto, atado con el cinturón. Error, en caso de accidente o frenazo el transportín se puede romper y el animal salir despedido. Pero aún es ponerlo en la bandeja, sobre el maletero, ya que el animal tampoco estará sujeto y un movimiento brusco puede hacer que baile. Si es pequeño, lo ideal es llevarlo en el suelo, tras el asiento del conductor o el copiloto, aunque también se puede llevar en el maletero y combinarlo con una reja o separador de carga.
Todos los estudios del RACE indican que la forma más segura de viajar es con el perro dentro de su transportín bien sujeto en el maletero y una reja o separador de carga que impida al transportín salir propulsado hacia delante en caso de frenazo o accidente. Por suerte, el uso de rejas y separadores es muy fácil, son muy económicos y se instalan y desinstalan fácilmente.
Otros consejos para viajar con perros
Más allá de utilizar rejas o separadores de carga, a la hora de viajar con perro en coche recuerda que, para evitar mareos y vómitos, el animal debe viajar con el estómago vacío. Hay que llevar siempre agua fresca y su bebedero para que el animal pueda refrescarse cuando paremos cada dos horas, momento en el que aprovechará para hacer sus necesidades y estirar las piernas. Y si nunca ha hecho un viaje largo, antes conviene acostumbrarlo al coche.
