Te has pasado un par de meses esperando a que llegue la nueva camada. Tu perra acaba ya ha terminado con el parto. Todos los cachorros son una auténtica monada, pero... ¿y ahora qué? ¿Qué hago? Una de las dudas más habituales entre los dueños de perros embarazados es qué hacer a partir del minuto 1 después del parto del perro, ya que hay que cuidar tanto a la madre como a la nueva camada que ha llegado a casa, y ambos necesitan unos cuidados especiales.
Uno de los aspectos básicos es la alimentación. Asegúrate de que los cachorros maman en las 3 horas posteriores a su nacimiento, siempre. Al principio es fácil que tengas que guiarlos, colocándolos junto a las mamas de la madre y sacando suavemente la leche. La madre tendrá unas necesidades nutricionales muy especiales para obtener suficientes nutrientes para ella y para toda la camada, por lo que haremos una excepción y le daremos pienso para cachorros durante la lactancia.
La higiene también es un punto muy importante. Los cachorros acaban de nacer, no tienen ninguna vacuna ni ningún remedio contra los parásitos y su sistema inmune es débil. Deben estar en un sitio tranquilo y limpio. Se recomienda limpiar la paridera a diario para evitar infecciones y también lo haremos tras el parto. Evita el contacto de la madre con otros animales en la calle, pero también que los otros animales que tienes en casa se acerquen a la paridera.
Estas normas de higiene no incluyen bañar ni a los cachorros ni a la madre. No lo hagas. Tras el parto también deberías programar una cita con el veterinario para que examine tanto a la madre como a los cachorros y te confirme que todo ha salido a la perfección. Aún así, en las semanas que siguen al parto presta una atención especial a la perra y a los cachorros. Si detectas algo extraño no dudes en comunicárselo al veterinario.
