Tener un chihuahua no es tener un perro cualquiera. Hay que tener en cuenta ciertos aspectos, aunque en general tener un chihuahua no supone un esfuerzo superior a tener otro tipo de raza. Son perros pequeños pero matones. Al ser tan pequeños están acostumbrados a estar siempre en alerta. Son perros que nos avisan de cualquier cosa extraña o inesperada, aunque lo hagan refugiándose en tus brazos.
Estos animales tan pequeños y graciosos tienen un estómago algo delicado, por lo que hay que tener un especial cuidado en los piensos para perros que elegimos para él. Elegir piensos de buena calidad es esencial. Piensa que el dinero que te gastes en una correcta alimentación para tu chihuahua marcará la diferencia en su salud. Hay que tener en cuenta que la comida que consume un chihuahua durante el día es mínima, gastarnos el dinero en una alimentación de alta gama no es un lujo si lo miramos por este lado.
Una alimentación adecuada debe comenzar en cuanto tenemos al perro en nuestro hogar. Cuando son pequeños tenemos que protegerlos de cualquier riesgo y su estómago diminuto es tan delicado que mejor no jugársela ofreciéndole cualquier pienso. Royal Canin chihuahua tiene un pienso específico para esta raza. Está indicado para cachorros de la raza chihuahua.
La cantidad de comida que debe consumir tu chihuahua dependerá del peso que vaya a tener de adulto. Para evitar dudas lo más sencillo y acertado es que sea el propio veterinario el que te diga la cantidad. Sobre todo cuando son cachorros es esencial que coma lo necesario, aunque en animales de esta raza las cantidades son pequeñas pero muy exactas, en la etapa de crecimiento es muy importante no quedarse cortos en la cantidad para que los perros no desarrollen algún tipo de desorden en la alimentación. Estamos hablando de cantidades como 40 o 50 gramos, que parecen una minucia, pero en un estómago tan pequeño es una gran diferencia.
A los chihuahuas no les gusta especialmente el momento de la ducha, pero definitivamente toleran mejor el agua que la hora de secarles el pelo con el secador para que no cojan frío. El ruido les aterra, da igual que pasen por ello una vez al mes. El champú que debéis usar también deberíais pedirle consejo al veterinario, hay algunos específicos para esta raza.
Estos perritos soportan fatal las bajas temperaturas, cuando tiemblan seguramente lo hagan de frío además de por miedo, lo mejor es comprarles una prenda de abrigo cuando haga menos de 6 grados. Como tampoco hace falta que les des paseos muy largos, en invierno lo mejor es que le des un paseo de unos minutos y vuelvas a dejarlo en el calor del hogar.
